Los Toldos Clásicos son posiblemente los más habituales, y los que utilizan el sistema tradicional de dos brazos fijados en la pared, y el sistema enrollable anclado bien al techo, o a la fachada de la vivienda.

Este sistema distingue tres tipos diferentes de instalación en función de cada necesidad: frontal, techo, y entreparedes.

Otra opción es la denominada «Stor», mediante la cual podemos fijar el toldo a la barandilla del balcón, teniendo también la posibilidad de dejar los brazos desplegados.